lunes, 11 de mayo de 2015

¿Quién te he dado permiso para tomar esta fotografía, oh fotografiador despreciable?

Bien te dije anoche, durante la lluvia de azucarillos, que no se te ocurriese ni entrar cuando estoy dándole el pecho a mis niños. No podrías ni imaginar el riesgo de burlar las normas ovíparas de mi especie. El consejo regulador etcétera multará con restricciones de trigo y de miradas cómplices mi delito de haberlos guardado bajo mi buche estos último meses, así que depón tu cámara, infame ladrón de secretos.

¿Las consecuencias? Tomaré yo mi cámara, mi grabadora de cintacassette y entraré en tu dormitorio por la noche, en el momento en que susurres al oído de tu esposa ese juramento que no estás dispuesto a cumplir. Esa promesa de eternidad que le haces todas las noches justo antes de besarle los párpados.

Todos en la granja sabemos lo que la oveja y tú ocultáis al resto del mundo.






viernes, 8 de mayo de 2015

La televisión en color era aquel sueño que no podíamos imaginar de niños los que ahora somos más jóvenes cada día. Ver a Mariano Medina, a Laurita Valenzuela en blanco y negro aguijoneaba nuestra imaginación. ¿De qué color es ese vestido, esa cortina, ese coche si el tono gris es de un veintitrés por ciento? Crema, rosa, verde, morado, vino, rojo atardecer.

Era un placer extranjero, un lujo británico, una envidia germánica.

El jueves que llegó la televisión en color a mi casa soñamos en color aquella noche. Pero el mundo de aquella ventana comenzó a ser demasiado evidente. Ya no se especulaba con los semitonos y sus equivalencias irisadas.

Por eso me he alegrado tanto hoy al ver que el gobierno ha decidido establecer el país en blanco y negro. Porque ahora, al caminar, podremos conjeturar sobre el color verdadero que tienen las cosas, y eso va a suponer que la imaginación de nuestros conciudadanos experimentará un ascenso que los educadores deseamos para que este mundo sea un poco más habitable cuando vamos a desayunar a cualquier sitio, por poner un ejemplo.




Hoy llueve todo el cielo. Un gran espacio, una hecatombe de gotas y ráfagas de calderos de agua y color gris se ha hecho propietaria del mu...